Esta entrada está dedicada a compartir recursos para los compañeros y compañeras que este curso escolar imparten la asignatura de Oratoria y Debate.
La presentación oral es la exposición clara y estructurada de ideas acerca de un tema determinado con la finalidad de informar y/o convencer a un público específico, a partir de un esquema previo o guión y suele ser una práctica habitual en el ámbito académico y escolar.
Una presentación oral no se improvisa. Para tener éxito debemos preparar minuciosamente el contenido de la exposición , así como los recursos y materiales de apoyo y la forma de expresión, dando respuesta al tema que vamos a tratar, las ideas que vamos a desarrollar, el orden en que vamos a exponer esas ideas, los recursos y materiales de apoyo.
Una de las tareas claves de la fase de preparación es la elaboración de un guión. El guión es un esquema que recoge los puntos esenciales que se van a desarrollar y nos permite presentar las ideas según un orden fijado, a la vez que reduce las posibilidades de que olvidemos algunas cuestiones importantes o de que nos quedemos atascados. Un buen guión debe cumplir los siguientes requisitos:
- Tiene que incluir las ideas principales de la exposición, expresadas de forma concisa.
- Ha de ofrecer una estructura clara, con las ideas organizadas y jerarquizadas. Solo de este modo podemos acceder rápidamente a la información que busquemos.
- Tiene que ser abierto, es decir, debe permitir la inclusión de nuevas ideas.
- Debe contener todos aquellos datos (fechas, nombres, citas) que se puedan reproducir de forma literal.
La expresividad de la voz es un aspecto clave. Nuestra pronunciación debe ser clara y el volumen de voz adecuado para que el mensaje llegue con nitidez al auditorio. Debemos evitar hablar en voz demasiado baja o gritar. Una entonación modulada, acompasada a los contenidos, contribuirá al éxito de nuestra actuación. Hay que evitar tanto el hablar demasiado rápido como la monotonía, ya que el auditorio puede acabar perdiéndose o aburriéndose, provocando que se desentienda del mensaje.
Es muy importante cuidar el lenguaje corporal . La posición del cuerpo y la expresión facial han de ser lo más distendidas posibles. Debemos controlar nuestros gestos, evitando la gesticulación excesiva aunque debemos remarcar con ademanes oportunos aquello que estamos diciendo. La mirada es un elemento fundamental, ya que hay que mantener el contacto visual con el auditorio, dirigiéndose al conjunto y no a una persona concreta.
Tenemos que demostrar que dominamos el tema, que lo hemos preparado a conciencia y que estamos en condiciones de comunicárselo a los demás adecuadamente.
Introducción: despertar el interés del público, captar su atención y plantear el tema central o la tesis que se va a seguir.
Desarrollo: concretar el objetivo de la presentación, insistir en las ideas principales y mantener la atención del auditorio.
Conclusiones: resumir el punto central de la exposición y responder a la pregunta o tesis inicial.
Recomendaciones finales
• Ensayar la presentación tantas veces como sea necesario.
• Permanecer de pie o sentarse adoptando una posición natural.
• Buscar, de vez en cuando, la espontaneidad.
• Evitar las muletillas.
• Modular el tono de voz y hacer pausas pertinentes.
• Articular bien las palabras.
• Recurrir a sinónimos.
• No abusar de adjetivos calificativos ni adverbios cuya terminación sea ‘mente’ (naturalmente, cómodamente, etc.).
• No utilizar palabras o expresiones extranjeras que no se entiendan.
• No sobrecargar la presentación solo con conceptos.
• Buscar diferentes recursos para mantener el hilo conductor y la atención del público. Por ejemplo, las anécdotas.
Fuente original: Deusto Centro de Idiomas. Verbum, aula de apoyo para la expresión oral y escrita.
En este enlace hemos recopilado una serie de videos de youtube que pueden ser de interés en relación a cómo realizar una buena exposición oral y ejemplos de lo que no se debe hacer.
Uno de los principales problemas a la hora de realizar una exposición en público es el miedo o pánico escénico (glosofobia) , sobre todo a la edad de nuestro alumnado.Pero la ansiedad de hablar en público puede ser causada no solo por el miedo a hacerlo, sino por cómo creemos que nos percibirán los demás.
El miedo suele ser proporcional al deseo de hacer las cosas bien, y aceptarlo es importante, pues la ansiedad nos genera reacciones psicofisiológicas complejas como boca seca, palpitaciones, sudoraciones, voz temblorosa o dolores de estómago.
Una estrategia importante el día de la presentación es darse la posibilidad de elegir entre dos opciones. La primera opción es declarar tu debilidad y hacer público tu miedo o la segunda, que ahora parece menos aterradora y más fácil de hacer, que es seguir hablando en público. Este truco mental puede permitir que nuestra mente, ante dos opciones, una menos aterradora que la otra, elija la menos aterradora y se ponga a hablar. En los raros casos en los que la gente se atreve a declarar su miedo, la tensión se suele disolver y el discurso es mejor y relajado.
También es útil la llamada visualización o ensayo mental, que usan muchos atletas en sus entrenamientos. La investigación ha demostrado que la visualización ayuda a mejorar el rendimiento en áreas como la comunicación, la oratoria y la educación. Y, por supuesto, en lugar de centrarte en los miedos (por ejemplo, la mente se queda en blanco, la audiencia se aburre) concéntrate en hechos positivos como que has practicado muchas veces el discurso, que eres un experto o tienes notas. Salir del bucle de malos pensamientos será una buena idea.
elconfidencial.com / ACyV, 04 julio 2022
Ebooks. Para saber más sobre cómo vencer la timidez :
“Oratoria Para Tímidos” resulta una guía clara, útil y práctica sobre el arte de presentar. Practicando sus sencillos ejercicios, controlarás a voluntad los síntomas y evidencias del temor a hablar en público.
Descubrirás no sólo cómo conquistar tu miedo escénico sino cómo disfrutar hablando ante cualquier audiencia.
• Te darás cuenta de que hacer presentaciones eficaces está al alcance de cualquiera, incluso de los más tímidos.
• Comprenderás que el nerviosismo del orador es un potente estímulo para hablar en público y con eficacia y trascendencia.
• Dejarás de sentirte ridículo y comenzarás a sentirte satisfecho con tus presentaciones.
• Pasarás del miedo al ridículo al placer escénico.
Porque podrás diseñar una presentación de impacto, en poco tiempo y de forma fácil. Transmitiendo, de manera fluida y clara, tu mensaje a tu público, sin miedo y con decisión.
Otra lectura aconsejable es “Hablar bien en público es posible, si sabes cómo” de Agustín Rosa, un joven universitario con muchas inquietudes y afán por aprender, que asiste a un curso de formación que acaba por ser muy aburrido y no cumplir con sus expectativas. A raíz de este curso el joven comienza a plantearse preguntas y dudas acerca de por qué hay oradores que triunfan, saben comunicar y motivar, mientras que otros son expertos en dormir auditorios. Este libro te ofrece valiosas enseñanzas para mejorar la calidad de tus presentaciones y ayudarte a disfrutar de una vida plena con alegría y mayor autoestima. Revela sencillas y eficaces técnicas de comunicación que te ayudarán a marcar la diferencia, conseguir resultados extraordinarios y que tus presentaciones impacten.
Ahora bien, si hay un libro útil para todo curso de oratoria, comunicación y relaciones humanas, recomendado para maestros y alumnos es “Las mejores técnicas para hablar en público” de Carlos Brassel, con el que aprenderemos a vencer el pánico escénico así como conocer todos los recursos de que se valen los buenos oradores para convencer, agradar y persuadir al auditorio.